Estoy seguro que este sueño tiene base en una película que me encanta, "Saw 2". Esta película es bastante gore y tiene uno de los aspectos principales grabados en mi sueño.
Como todos los sueños, no me acuerdo como empieza, simplemente estoy en medio de todo. Lo primero que recuerdo de mi sueño es que todos estamos en una casa vieja, ciertas cosas se parecen a una casa de Michoacán. Tengo que señalar que ya había tenido este sueño antes, así que aunque esta vez el sueño esta incompleto, sé que pasó antes en la cronología. Estamos varias personas, no conozco a nadie en realidad, ya sea que uno de ellos sea un amigo real o dentro del sueño. Todo estamos extremadamente presionados, pues al parecer vamos a morir.
La causa principal de nuestra desesperación viene de querer salir de la casa antes de que algo nos pase. Es aquí donde entra mi película. Tenemos todos un número en la nuca. Aunque en la película este número es para una combinación de una caja fuerte donde se encuentra un antídoto para el veneno. En mi sueño nunca estoy seguro de para que se usa. La gente ya se esta matando unos a otros, pero hasta este momento no he presenciado nada en primera persona. Yo y otras tres personas vemos que varios vienen hacia nosotros, en un intento de resguardarnos de ellos, nos metemos a un cuarto y cerramos la puerta.
Para este momento las personas que nos atacan tienen un estado de salud terrible, al parecer el estar en la casa te mata. Las otras tres personas me ayudan a poner cosas pesadas en la puerta mientras yo la detengo con mi hombro. Estoy muerto de desesperación ya que todo lo que agarramos esta vacío y no pesa absolutamente nada. Después de un rato las personas dejan de tratar de entrar y me encuentro enfrente de los otros tres.
La primera persona es una chava. Tiene entre 20 y 30 años y usa una playera azul. Esta distraída. La segunda persona es un chavo también joven. De juzgarlo en mi sueño se que es una buena persona. La tercera persona también es un chavo, de la misma edad que el otro. Y aunque para todos los demás ha disimulado ser una buena persona, yo se que en realidad sólo esta mintiendo. Pasan dos segundos y me doy cuenta de los planes de la tercera persona. Nos quiere matar.
En mi mano se encuentran 4 cuters. Supongo que para preservar la justicia divina, le doy uno a cada uno. Dentro del pequeño cuarto que se encuentra sin mucha luz y lleno de cosas viejas y estorbosas, nos empezamos a cortar. Las cortadas obviamente no me duelen, pero muero de desesperación cada que siento la navaja cerca de mi. Al final las otras dos personas, el chavo y la chava, se dan cuenta de las intenciones de la tercera persona y me ayudan a matarlo. Después de cortarlo en varios pedazos, lo metemos en unas cuantas bolsas, yo supongo que es para que no se den cuenta que fuimos nosotros, y salimos del cuarto.
Ya fuera, regreso a la casa de Michoacán. Hay un pasillo bastante largo. Hay alguien sentado en el piso, llenando una jeringa con algo letal. Sigilosamente me la da. No quiero que nadie vea que la tengo, porque me matarían en un instante, así que la tiro al piso lo más disimuladamente posible. No fue tan fácil como pensé. La chava que se encontraba conmigo en el cuarto la toma y la guarda. Ella esta peleada con una persona que se encontraba fuera del cuarto. Un señor, 40 años tal vez, fuerte pero flaco, rapado, con tatuajes. Nos dirigimos hacía otro cuarto donde encontramos a este señor. La muchacha hace lo que yo temía, se acerca por atrás de él a enterrarle la jeringa. Desgraciadamente el señor se da cuenta y la detiene. Avienta la jeringa a un lugar que se queda fuera de mi sueño. Tira la chava al piso y agarra su bat. Empieza a pegarle una y otra vez con el bat. Nosotros vemos por un rato. Al final sólo quedan las piernas de la chava, y su falda empapándose lentamente de sangre. Donde había cara y torso, sólo quedan pedazos de carne. El señor me da las gracias levantando su bat un poco al aire.
Al parecer en la historia del sueño, aunque no dentro de este sueño en particular, le salvé la vida. No nos hace nada y nos deja ir. El sueño ya esta a punto de terminar, puesto que ya salimos de la casa. Después de un tiempo, este señor me manda llamar. Quiere consejos para su hija, no se de qué tipo. Llego a un lugar en construcción, ciertas bolsas negras se parecen mucho a los bultos donde dejamos a la persona que descuartizamos. Subo por unas escaleras, me arrastro abajo de vigas. Llego con él. Acaban de matar a una de sus dos hijas. "Alguien tiene que pagar." No se si se refiere a mi, o si yo voy a tener que hacer el trabajo por él.
Pensamientos:
Para que no se me olvide, esta idea fue propuesta por un amigo y me pareció extremadamente buena.
Hoy por fin encontré dos cosas que había estado buscando por ya cierto tiempo.
La primera, una excusa para hacer un blog, no le veía ninguna utilidad a tener un blog pues no tenía algo sustancial que poner dentro de él. Mínimo esa excusa ya está aquí.
La segunda cosa, aunque un poco más tonta, era otra excusa para escribir con acentos. Odio los acentos. Yo sólo espero el día cuando erradiquen los acentos del español. Esperaré y esperaré.
No hay comentarios:
Publicar un comentario